FESTIVAL DEL MELÓN Y LA SANDÍA
El festival del melón y la sandía se realiza todos los años en el mes de enero, y ha llegado a recibir más de 15.000 personas. El primer festival fue organizado por la Unión Vecinal y se llevó a cabo en el año 1977. Se armó para homenajear la producción del melón y la sandía, tan distintiva del departamento. Años posteriores se constituyó una comisión directiva con personería jurídica (1997), la cual comienza a funcionar en el 18 de febrero de 1998.
En la actualidad cuenta con un predio completamente equipado: un amplio terreno forestado para camping, los sanitarios correspondientes, una amplia pileta para el agua potable, una amplia playa de estacionamiento, escenario y salón. En el año 2012 se construyó el salón, el cual previamente era un quincho hecho con tapas de madera y caña.
En su quinta edición, se estrena la “Marcha del Melón y la Sandía”, escrita por el señor Raúl Catroppa, integrante del grupo folclórico “Las Voces de California”. En su octava y novena edición (1994-1995) se realiza un homenaje a Mary Carmen Orellano, una lavallina con espíritu de trabajo social, que colaboró en la promoción del festival, distrito por distrito, y fue locutora en el evento durante muchos años y quien lamentablemente falleció de cáncer en el año 1994.
En las ediciones de los años 1996 y 1997 el festival ya toma volumen y relevancia nacional y se inicia la entrega de premios “Cunino Talquenca” en homenaje a un hombre Huarpe radicado y sepultado en el distrito, que solía andar a caballo con su guitarra a la espalda y que fue admirado por vecinos y vecinas. Desde esos años el festival recibe a artistas nacionales prestigiosos.
Según la comisión directiva, el festival tiene una impronta propia que lo distingue de otros festivales: se le da activa participación a las escuelas, a la parroquia, cediéndole espacios para la venta de comidas, a la industria y comercio para que promocionen sus productos, a la agrupación gaucha para exposición de sus destrezas. A la madrugada se organiza una mateada donde se reparte la típica sopaipilla.